El número de personas muertas tras el terremoto de magnitud 5,6 que sacudió la provincia de Java Occidental de Indonesia aumentó a 62, según Abdul Muhari, director del Centro de Datos, Información y Comunicación de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres.
La cifra de Muhari corrige la de los 162 los fallecidos que horas antes reportó Ridwan Kamil, gobernador de Java Occidental, de manera errónea.
Aún hay 25 personas desaparecidas, agregó Muhari.
Además, unas 326 personas también sufrieron heridas, en diversos grados de gravedad, informó Kamil en una conferencia de prensa previa.
Inicialmente, el gobernados había hablado de más de 700 heridos. “Todavía hay muchos residentes atrapados en los sitios del incidente, asumimos que las víctimas heridas y muertas seguirán aumentando con el tiempo”, dijo en su momento.
El terremoto golpeó la región de Cianjur en Java Occidental a una profundidad de 10 kilómetros, según el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS).
El fuerte sismo llevó al desplazamiento de al menos 13.782 personas, que serán reubicadas en 14 campamentos de refugiados. Al menos 2.345 viviendas resultaron dañadas.
Cuatro escuelas y 52 casas se derrumbaron o sufrieron graves daños, según la oficina local de la Agencia Nacional para la Gestión de Desastres (BNPB). Una mezquita y un hospital también sufrieron daños, según la agencia.
El BNPB dijo que no hay riesgo de un tsunami, informó Reuters.
Herman Suherman, un funcionario del gobierno en Cianjur, dijo a los medios que algunos residentes quedaron atrapados entre los escombros de los edificios derrumbados. El canal de noticias Metro TV mostró lo que parecían ser cientos de víctimas siendo tratadas en el estacionamiento de un hospital.
Suherman dijo que un internado islámico también resultó dañado, mientras que las comunicaciones se interrumpieron debido a cortes de energía.
Las imágenes de televisión mostraron a los residentes acurrucados fuera de los edificios reducidos casi en su totalidad a escombros, según Reuters.
Un residente, nombrado solo como Muchlis, dijo que sintió “un gran temblor” y que las paredes y el techo de su oficina estaban dañados.
“Estaba muy impactado. Me preocupaba que hubiera otro terremoto”, dijo Muchlis a Metro TV.
El BMKG dijo que advirtió sobre el peligro de derrumbes, particularmente en caso de fuertes lluvias, ya que se registraron 25 réplicas en las dos horas posteriores al sismo.
Hablando en una conferencia de prensa, el gobernador Kamil dijo que es probable que el número de muertos aumente aún más.
Actualmente, los rescatistas no pueden llegar a algunos de los atrapados, dijo, y agregó que la situación sigue siendo caótica con la posibilidad de que se produzcan más réplicas.
Las autoridades gubernamentales están construyendo tiendas de campaña y refugios para las víctimas mientras atienden sus necesidades básicas, agregó Kamil.
Indonesia se encuentra en el “Anillo de Fuego”, una banda alrededor del Océano Pacífico que desencadena frecuentes terremotos y actividad volcánica. Una de las zonas con mayor actividad sísmica del planeta, se extiende desde Japón e Indonesia por un lado del Pacífico hasta California y Sudamérica por el otro.
En 2004, un terremoto de magnitud 9,1 frente a la isla de Sumatra, en el norte de Indonesia, provocó un tsunami que asoló 14 países y mató a 226.000 personas a lo largo de la costa del Océano Índico, más de la mitad de ellas en Indonesia.