El expresidente de Estados Unidos Barack Obama pidió este domingo al Partido Demócrata nominar a un «candidato extraordinario» para las elecciones de noviembre, en un comunicado en el que evitó respaldar a la vicepresidenta, Kamala Harris, como futura candidata.

Obama calificó al actual mandatario, Joe Biden, quien fuera su vicepresidente entre 2009 y 2017, como «un patriota de primer orden» por haber renunciado este domingo a su campaña de reelección tras semanas de presiones internas por su desastroso papel en el debate electoral contra el expresidente republicano Donald Trump.

«En los próximos días navegaremos por aguas desconocidas, pero tengo una enorme confianza en que los líderes de nuestro partido serán capaces de crear un proceso del que surja un candidato extraordinario», afirmó Obama.

El expresidente pidió que durante la Convención Nacional Demócrata del próximo agosto en Chicago, donde el partido podría nominar a su candidato para las elecciones, se exhiba «la visión de Joe Biden de unos Estados Unidos prósperos y unidos».

«Espero que todos y cada uno de nosotros estemos preparados para llevar ese mensaje de esperanza y progreso en noviembre«, agregó.

Obama, sin embargo, no mencionó en el comunicado a Kamala Harris, a quien Biden respalda como su sucesora para hacer frente a Trump el próximo 5 de noviembre. «Por el momento, Michelle y yo queremos expresar nuestro amor y gratitud a Joe y Jill por liderarnos tan capaz y valientemente en estos tiempos peligrosos y por su compromiso con los ideales de libertad e igualdad sobre los que se fundó este país», ha remachado.

Obama no ha sido el único dirigente demócrata que no ha apoyado la decisión de Biden de respaldar a Harris como sucesora. Tampoco lo han hecho los portavoces demócratas en el Senado y la Cámara de Representantes y otras voces abogan abiertamente por un proceso «abierto» para nombrar candidato.

El expresidente participó en varios eventos de recaudación de fondos para la campaña de Biden y de Harris, pero durante las últimas semanas varias filtraciones lo señalaban como uno de los operadores que estaban intentado que el líder demócrata tirara la toalla. Su mujer Michelle, de hecho, surge como favorita en algunas encuestas frente a Trump si decidiera dar el paso como candidata a la nominación demócrata, como desean algunos miembros del partidos.

La tensión aumentó cuando antiguos asesores de Obama, ahora presentadores del popular pódcast Pod Save Americasugirieron que Biden debería retirarse. Esto se interpretó, acertada o erróneamente, como un mensaje proveniente del círculo cercano al exmandatario.

El distanciamiento entre ambos líderes demócratas tiene raíces en 2016, cuando Obama favoreció la candidatura de Hillary Clinton, quien había sido su secretaria de Estado, sobre la de su entonces vicepresidente.

En el comunicado de este domingo, Obama dijo que la renuncia de Biden es un testimonio «del amor por su país» que tiene el presidente y «un ejemplo histórico de un servidor público que antepone los intereses del pueblo estadounidense a los suyos propios».