La crisis de Gobierno abierta en Italia por la falta de apoyo a Mario Draghi mostrada por el Movimiento 5 Estrellas (M5E), uno de los socios principales de la coalición gubernamental, afrontará su jornada decisiva el próximo miércoles, cuando el primer ministro comparezca en el Parlamento y anuncie si seguirá o no al frente del Ejecutivo.
En función de si Draghi da o no carácter de irrevocable a la dimisión que rechazó el pasado jueves el jefe del Estado, Sergio Mattarella, mandándole al Parlamento, se abren cuatro posibles escenarios que van desde que todo siga igual hasta que se convoquen elecciones anticipadas, la opción más plausible en estos momentos, según la mayoría de los expertos.
En cualquier caso, la crisis política está enormemente abierta, con cuatro posibles salidas que son:
CON DRAGHI
El Gobierno actual se mantiene: Todas los partidos de la coalición gubernamental, incluido el M5E, muestran su apoyo a Draghi, que acepta permanecer como primer ministro, posiblemente tras alcanzar un nuevo acuerdo de gobierno y votar una moción de confianza en el Parlamento. Se trata de una opción complicada porque el M5E se encuentra sumido en la confusión, con posiciones diversas al respecto y, además, los partidos de derechas de la mayoría que apoya Draghi, la conservadora Forza Italia y la aultraderechista Liga, han mostrado su oposición a mantener la alianza con el M5S.
El Gobierno actual termina y Draghi preside un nuevo Ejecutivo: El primer ministro dimite, pero recibe un nuevo mandato del Jefe del Estado para formar gobierno, que puede tener la misma mayoría o una diferente, posiblemente la misma que ahora sin el M5E. Es una hipótesis improbable, ya que el primer ministro ha reiterado que no dirigirá un «Draghi bis» y más aún sin el M5E en la alianza de Gobierno, que ha sido la razón de que presentase su dimisión.
SIN DRAGHI
Se nombra un nuevo primer ministro que permita terminar la legislatura: Draghi dimite y Mattarella encarga a otro que dirija el Gobierno hasta la próxima primavera, o al menos hasta fin de año para que se pueda aprobar la Ley de Presupuestos, para lo cual sería necesario un «técnico», como el ministro de Economía, Daniele Franco, el nombre que más suena. Es una opción también muy poco realista, ya que la mayoría de los líderes de la coalición -a los que es muy complicado poner de acuerdo- ya han dicho que sin Draghi la única posibilidad son las elecciones.
Se convocan elecciones anticipadas: Draghi dimite y Mattarella disuelve las Cámaras. Las elecciones serían convocadas para el 25 de septiembre (o el primer domingo de octubre), según los plazos que marca la Constitución, y el Gobierno continuaría en funciones para gestionar la «ordinaria Administración», aunque no está claro si eso permitiría aprobar los decretos más urgentes y la Ley de Presupuestos. Hasta la toma de posesión del nuevo Parlamento y el nuevo Gobierno, Draghi podría seguir siendo el primer ministro hasta noviembre. Por el momento, esta es la hipótesis con más posibilidades, pero nada está decidido ni lo estará hasta el próximo miércoles.