La elección de zapatos no siempre persigue oro y diamantes, ni ser piezas de coleccionista. En el entorno laboral los criterios son otros. Estos son los 15 mejores calzados para trabajar de pie y cómo elegirlos.
Escoger el calzado adecuado para la jornada laboral no es una cuestión baladí. Mientras que para ocasiones ociosas la elección queda supeditada casi exclusivamente al gusto y estilo. Sin embargo, para el trabajo no vale cualquier zapato.
No es lo mismo un empleo de oficina -donde se estilan más los zapatos con cordones y mocasines- que un empleo que requiera condiciones específicas de seguridad o bien que implique muchas horas de pie o caminar constantemente. Existe incluso calzado específicamente diseñado para el teletrabajo.
Sin duda, quienes trabajan de pie deben prestar especial atención a su calzado. Escoger uno inadecuado trae consigo consecuencias que van mucho más allá de la mera incomodidad. Calzar un zapato poco apropiado en estas circunstancias puede derivar en una mayor sensación de cansancio, así como dolores de espalda, de piernas y dolencias en las articulaciones de tobillos y rodillas. Hinchazón de pies, juanetes, ampollas y heridas por rozaduras completan la lista de problemas que conviene evitar optando por el calzado correcto.
Consejos para escoger el calzado para trabajar de pie
El calzado para trabajar de pie ha de priorizar la comodidad, la sujeción y la transpiración. La plantilla debe recoger el pie y proporcionarle estabilidad a la pisada, compuesta por materiales confortables y esponjosos.
La suela debe ser ergonómica para amortiguar las pisadas y también antideslizante. Asimismo, es conveniente evitar suelas completamente rectas y buscar mejor aquellas que se eleven en el talón ligeramente.
También hay que procurar que el zapato sea de un tejido suave y transpirable, ancho y que no oprima los dedos de los pies, sin demasiadas costuras para evitar rozaduras y con buena sujeción en el empeine y el talón. Lo más adecuado son aquellos zapatos con cordones o velcro. Si la opción son mocasines, que sean especializados, antideslizantes y con una correcta sujeción, que no se descalcen al caminar.
Y, por supuesto, se escoja cual se escoja hay que acertar con la talla exacta. Otro consejo a tener en cuenta es no abusar de su vida útil, tratar de alternarlos entre días y ventilarlos todo lo posible.
Cómo elegir calzado según el trabajo para estar de pie
En el empleo de la hostelería -tanto camareros como cocineros-, el calzado debe tener buena sujeción, ser transpirable y con suelas amortiguadoras, flexibles y ligeras, así como antideslizantes. También es importante que se puedan lavar con facilidad.
En el oficio de limpieza se deberá además buscar que el calzado proteja frente a posible vertido de productos corrosivos. También insistir en que la suela aporte una correcta sujeción, para evitar resbalones.
En el gremio de la peluquería y estética, así como el calzado para sanitarios, la ligereza y transpiración son clave. Aquí predominan los zuecos, en cuyo caso lo más beneficioso es que incorporen sujeción trasera.
Si el empleo exige llevar zapato de tacón, como puede ser el caso de las azafatas de vuelo, es conveniente que el tacón no supere los cuatro o cinco centímetros de altura. Que la puntera y el tacón sean anchos y con una buena sujeción del pie.
Por último, en empleos con factor de peligrosidad como la construcción, el calzado debe proteger el pie de caídas y golpes con punteras reforzadas. Aquí se erigen como calzado predilecto las botas con cordones, que además aporten buena sujeción.
Los 15 mejores calzados para trabajar de pie
Arch Fit SR Axtell de Skechers. Un modelo especialmente diseñado para el trabajo con cordones, suela antideslizante y un sistema patentado de plantilla extraíble de amortiguación Arch Fit.
Zueco ultraligero Eva de Dian. Un zueco ultraligero libre de látex, anatómico y antideslizante. Con perforados laterales para mayor transpiración. Correa posterior y una planta con micropuntos de masaje para estimular la circulación sanguínea.
Camarero Calderoni de Payma. Zapatos de trabajo con plantillas cómodas y de piel suave, especialmente indicados para hostelería.
Zapatos Hold de Zerimar. Calzado de hombre pensado para la hostelería, con piel natural transpirable y absorbente. Goma antideslizante, amortiguación y tracción aseguradas.
Blucher piel cierre velcro de 24 HRS. Blucher de hombre de piel con cierre elástico, puntera redonda y suela ultraligera.
Argos S1P de Panter. Zapatilla de seguridad con cordones, tejido de alta resistencia con refuerzo de poliuretano flexible que se ajusta perfectamente a la ergonomía del pie. Ultra transpirable.
Flotantes Gruyere de Feliz Caminar. Zuecos flexibles, antideslizantes y antibacterianos, con horma anatómica y ergonómica. Plantilla transpirable y tejido que absorbe el sudor de los pies.
Energy Plus Man de Scholl. Zapato ligero y flexible con una plantilla extraíble con tecnología Memory Cushion que ayuda a relajar el pie al redistribuir la presión en toda la planta.
Liverpool M2A-6252 de Pikolinos. Deportivas flexibles con piel 100 % de vacuno, forro interior de piel y plantilla acolchada.
Modelo 51101 de CallagHan. Deportivas que se adaptan al pie, ligeras y flexibles, favorecen la amortiguación. Con piel natural ultrasuave.
Sirmione Hombre de Geox. Zapato de diseño informal y máxima comodidad. Confort y transpirabilidad gracias a la tecnología Respira, original de Geox.
Donaway Plain de Clarks. Zapato de vestir casual con estética deportiva. Plantilla Contoured Comfort con soporte para el arco del pie, que ofrece comodidad y seguridad.
Trophus ST de Skechers. Zapato con cordones, malla y piel de nobuk. La plantilla lleva la tecnología de amortiguación de Skechers Air Cooled Memory Foam y suela de acero.
Flying Wing Blaco SO de Dunlop. Calzado de trabajo sin puntera, cómodo y flexible. Con plantilla antiperforación y suela antideslizante.
Spherica Hombre de Geox. Deportivas con alto grado de amortiguación y transpirabilidad. Sistema zero-shock con esferas amortiguadoras en la suela para potenciar la absorción de impactos y esfuerzos.