En medio de lluvias sin precedentes, Margaret Shellert, residente de St. Louis, Missouri, enfrenta la peor parte de las devastadoras inundaciones consecutivas esta semana.
Después de que la región fuera azotada por lluvias torrenciales este lunes y martes, una segunda ronda de tormentas exacerbó este jueves aún más las condiciones para ella y muchos en la ciudad.
“Mi casa nunca se había inundado. Nunca le había entrado agua. Esta es la primera vez”, dijo Shellert a KMOV, afiliada de CNN. «Todos mis pisos están arruinados, los muebles están arruinados, todos los electrodomésticos están arruinados».
La angustiante inundación que la golpeó a ella y a otros se produjo cuando las tormentas azotaron el área de St. Louis este jueves, sumergiendo parte de la ciudad en dos metros de agua y atrapando a algunos residentes en sus hogares, dijeron las autoridades.
St. Louis quedó inundado con más de 220 mm de lluvia desde el lunes por la noche hasta el martes, superando el total de precipitaciones en 24 horas más alto registrado en la ciudad de 178 mm en 1915, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Las áreas alrededor de St. Louis vieron alrededor de 152 a 250 mm de lluvia en un lapso de seis horas de lunes a martes, dijo el Servicio Meteorológico. La inundación repentina se cobró la vida de al menos una persona y provocó múltiples cierres de carreteras en varias carreteras interestatales, dijeron las autoridades.
«Las inundaciones repentinas generalmente se caracterizan por torrentes embravecidos después de fuertes lluvias que rasgan los lechos de los ríos, las calles urbanas o los cañones de las montañas y arrasan con todo lo que encuentran a su paso», dijo el Servicio Meteorológico. «También puede ocurrir incluso si no ha llovido, por ejemplo, después de que un dique o una presa fallan, o después de una liberación repentina de agua por un atasco de escombros o hielo».
El residente de St. Louis, Jeff Boshans, le dijo a la afiliada de CNN, KSDK, que las inundaciones alcanzaron los 228 mm de altura en su sótano luego de la inundación del martes.
«Imagínate todas tus pertenencias en una habitación en el sótano que básicamente flotaron hasta el techo y luego se derrumbó». Boshans dijo.
Los residentes intentan limpiar un desagüe en St. Louis el jueves 28 de julio.
‘Esto no es normal’, dicen sobre las lluvias torrenciales
Durante la segunda ronda de inundaciones de este jueves, personal de respuesta inmediata en St. Louis rescataron a seis niños de una guardería que quedaron atrapados cuando el nivel del agua subió. No se reportaron heridos, dicen las autoridades.
Sesenta personas que enfrentaron crecidas durante la tarde también fueron rescatadas o asistidas, según el Departamento de Bomberos de la ciudad.
Mientras tanto, St. Louis ArtWorks, un programa sin fines de lucro de arte y habilidades para la vida para jóvenes desatendidos, perdió alrededor de US$ 60.000 en daños después de que las inundaciones inundaran el sótano de su edificio el martes y jueves.
Mientras que la inundación del martes fue «irregular» en algunas áreas del edificio, la inundación del jueves fue mucho peor, según Jacqueline Dace, directora ejecutiva del programa.
El jueves, el agua “estaba brotando en varios lugares”, dijo Dace a CNN. «El agua entraba por las paredes y las puertas. El agua no tenía a dónde ir ya que el suelo estaba muy saturado».
Dace agregó que nunca antes había visto inundaciones tan intensas en el área.
«Esto no es normal. Normalmente, dentro de las áreas rodeadas de la ciudad de St. Louis, podemos sufrir inundaciones, pero no afecta tanto al centro de la ciudad como lo ha hecho esta semana», dijo Dace.
Gateway Pet Guardians usa un bote para ayudar a los dueños de mascotas a rescatar a dos gatos y un perro de su casa en Terrace Dr. en East St. Louis, Illinois, el 28 de julio de 2022.
Es probable que estos fenómenos meteorológicos extremos se vuelvan más frecuentes e intensos a medida que la crisis climática persista a nivel mundial.
La atmósfera puede contener más humedad a medida que aumentan las temperaturas, lo que hace aún más probable que se rompan récords significativos. Más vapor de agua en la atmósfera significa más humedad disponible para caer en forma de lluvia, lo que conduce a índices de lluvia más altos.
Las emisiones de combustibles fósiles provocadas por el hombre han calentado el planeta un poco más de 1 grado centígrado en promedio, con un calentamiento más intenso en las áreas terrestres.